lunes, 18 de junio de 2012

El feng shui permite mejorar el ambiente laboral o del hogar

El milenario arte del feng shui, que según explican los especialistas atrae energías positivas, de a poco ingresa a los hogares nacionales. Con pequeños detalles se puede mejorar el equilibro energético en los hogares u oficinas.

energía. Básicamente el feng shui se basa en la existencia del chi, energía que puede ser alterada según la forma y disposición del espacio, los puntos cardinales y los cambios temporales.

Así, esta energía puede influir en el estado de ánimo de las personas en la oficina o el hogar, por ello ya comienza a aplicarse.

Parece simple; sin embargo, la posición en que pone su mesa de trabajo o su cama, puede llegar a ser determinante para la armonía que se siente en ese espacio y afecta a factores como la concentración cuando trabaja y convive en ese espacio.

Dónde aplicarlo. Los espacios que más hay que cuidar son las zonas de mayor uso, “lugares donde se desarrollen funciones de relevancia para el desarrollo personal o profesional”, explicó Beatriz Fernández, especialista española.

En una vivienda se busca obtener tranquilidad, seguridad y confort. “Las zonas comunes y de mayor actividad disponen de unas pautas distintas que las zonas de descanso o de trabajo y estudio, pero todas ellas son importantes para conseguir un hogar confortable y de calidad”, comentó Fernández.

En la oficina. Según Jaqueline Kokali, del Centro Cinco Sentidos, lo ideal en una oficina es que las personas que trabajan en ese ambiente lo hagan dando la espalda a la pared. "Esto permite que se sientan más seguras y sientan el poder de la muralla", explicó.

Otro aspecto importante es evitar que los papeles se acumulen, ya que se convierten en energía estancada. "Lo que no sirve se debe votar para dar paso a nuevas energías", explicó Kokali.

El orden y la limpieza son esenciales. En un escritorio ordenado y limpio se trabaja mejor y las personas se sienten menos agobiadas..

En el hogar. Existen consignas generales para mantener el equilibrio energético en el hogar, como es “el orden, la limpieza, que las puertas no estén enfrentadas, que las ventanas y las puertas no estén en línea, que no haya un pasillo nada más abrir la puerta, y con una ventana al fondo, que haga que se escape la energía positiva", explicó Marina Ponce de León, consultora de España.

La calidad energética de un espacio no es algo que se vea, “solo se siente”, concluyó Fernández.

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