martes, 13 de agosto de 2013

Técnica Ombré en la decoración

Ombré, así se conoce a la técnica utilizada por los estilistas para colorear el pelo en degradé y que aplicada en la decoración, puede hacer de cualquier ambiente, un espacio divertido y originalmente coloreado.

Versátil. Esta interesante técnica ha pasado por los estilistas e incluso el mundo textil y ahora está siendo aplicada en la decoración.

Básicamente consiste en utilizar tonos de una misma gama, de forma que el pintado comience en el blanco, luego pasa a los colores más suaves, hasta llegar a los más oscuros, siendo una especie de difuminado en paredes y objetos.

Los colores oscuros y fuertes son realmente encantadores, pero en ocasiones da cierto temor combinarlos y o comprometer la iluminación de los espacios. Sin embargo, esta técnica es perfecta para aprovechar el color, saliendo además de lo tradicional recreando un ambiente muy original.

Elección de los colores. La elección de los colores es la clave en esta ingeniosa técnica. Lo que se necesita es elegir tonos que marquen la diferencia entre sí, usando siempre como base el blanco o un tono claro, luego se comienza a pintar las capas. Para facilitar el trabajo y obtener mejores resultados, es ideal marcar las líneas en la pared.

Además, puedes combinar el método Ombré con otras como la Chevron, por ejemplo, si lo que quieres es usar líneas más definidas puedes usarlo y degradar los colores en las figuras geométricas. En realidad el difuminado aporta mucho a cualquier decoración que tengas en casa, realza muchos los detalles y sobre todo, resuelve al mismo tiempo el tema de la luz y la amplitud del espacio.

Aplicación. Y si bien, en esta oportunidad se habla de las paredes, este método también es una excelente alternativa para aplicarlo en otros accesorios como, muebles de madera y demás objetos decorativos que pueden tomar vida y darle dinamismo al lugar, sin necesidad de comprar nuevos accesorios.

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