Las paredes. El color es muy importante. Hable con su hija cerca de los colores que imagina en su dormitorio. Los favoritos son los colores pasteles, rosado y lavanda para las paredes y telas. Otras niñas en cambio prefieren tonos brillantes de amarillo, rojo y azul.
Una opción es pintar las paredes con un tono azul que combine con el cielo. Otra alternativa es pintar las paredes de blanco y con plantillas coloridas, colorear mariposas revoloteando en la habitación. Las plantillas son fáciles de utilizar. Incluso puede colocar guardas que muestren mariposas en colores que ella haya elegido.
Los muebles. El color de la alfombra es un tema de gusto y rango de costo. Los muebles clásicos de color blanco siempre se ven bien en la habitación de una niña y combinará con cualquier decoración de la habitación que se haga en el futuro.
Una cama con dosel es el deseo de muchas niñas, y hay camas blancas de metal que tienen forma de mariposa en la cabecera y en los pies de la cama.
Para darle un toque más personalizado puede reemplazar las perillas de las puertas y cajones de sus muebles con unas que tengan formas de mariposas, o de porcelana refinada.
Un juego de ropa de cama que combine sábanas, acolchado, cobertor y cortinas, realmente coordinarán la habitación.
En las ventanas. Puede incluir volantes con cortinas blancas para que ondeen con fuerza con la brisa.
Para continuar con la temática de las mariposas, adquiera una papelera con forma de tulipán o decorado con mariposas.
En el marco alrededor de su espejo, pegue pequeñas mariposas de nailon de varios colores.
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