Lo ideal es que la alfombra se complemente con las paredes. Así que tome en cuenta que la alfombra no puede ser del mismo color que los muros o tendrá una sala monocromática sin gracia.
Si las ventanas dejan entrar mucha luz y hacen brillar la habitación, lo mejor sería un color de alfombra que sea alegre para que su casa brille más y le agregue el glamour que está buscando.
El color de la puerta es importante. Por ejemplo, las de color blanco hacen que las alfombras brillantes luzcan muy bien, mientras que las de madera quedan mejor con alfombras de colores jugados.
Por último, si el techo de la habitación donde quiere colocar la alfombra es blanco, lo mejor es una alfombra de tono fuerte; en cambio si está pintada, la mejor opción será elegir un tono claro.
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