Espacios recargados. El error que mucha gente comete es poner todo, por todos lados. Muebles enormes y desproporcionados junto a objetos de gran tamaño. Todo junto y consecutivo, sin dejar ni un solo espacio libre porque lo cubrieron con todo lo que tenían, mesitas, cuadritos y cuadros, almohadones, alfombras y tapices.
Este es uno de los tantos errores que se comete al decorar. Ni siquiera se toma en cuenta que los colores o estampados combinan entre sí. El espacio se torna agobiante.
Circulaciones obstruidas. No se debe obstaculizar la circulación que va a los balcones o jardines, ni colocar sillones, mesas o sillas delante de las puertas de salida. Da la sensación de desorden, porque cada vez que se quiere salir, debés mover todo lo que se encuentra delante de las puertas.
Colores que no combinan. Lo importante en la decoración es la armonía. El color debe amalgamarse con la decoración y no competir por el protagonismo con los demás objetos. Es decir, si en el ambiente la protagonista es una pared, está bien que ese sea el punto focal y que el color impere. Pero, si hay otros muebles, cuadros o sillones, el color debe ser solo un detalle.
Lo primero que se debe hacer al decorar es seleccionar una paleta de colores y elegir los colores en base a ella. Se puede utilizar pequeños toques de color, pero en pequeños detalles como en candelabros, o adornos que no sean de gran tamaño. Los sillones, cortinas, almohadones, las lámparas, las alfombras y el color de las paredes, deben estar dentro de la paleta seleccionada.
Mezcla de estilos. Es otro error muy frecuente. Se puede mezclar algo vintage o algo moderno, o a la inversa. Lo que no queda bien es minimalismo, mezclado con un poco de estilo oriental y estilo francés. En decoración esas mezclas suelen quedar fatales y el resultado es la ausencia de armonía.
No hay comentarios:
Publicar un comentario