A la horade decorar el cuarto de tu hijo o tu hija será de gran utilidad el recurrir a elementos coloridos y divertidos que sirvan además para estimular y fomentar su creatividad a través del juego, la pintura, la música y el aprendizaje.
“Dibujar, colorear, crear, armar, inventar historias los hace sentir libres, explorar o cambiar”, expone Verónica Paz, arquitecta que junto a dos de sus colegas armó una habitación para niños de entre seis y diez años de edad que se encuentra en la exposición de diseño y arquitectura Casa Cor, que se celebra en la casona ubicada en el 220 de la calle 24 de Septiembre de Santa Cruz .
Las expertas trabajaron en el rediseño de dos de los 38 espacios que se han adecuado en este inmueble, que mostrará las tendencias del ramo hasta el 10 de mayo.
Ellas eligieron las piezas de Lego porque fomentan el desarrollo de la creatividad de los niños a través del juego, el aprendizaje y armado, explica Paz. Los bloques son de plástico interconectables o ladrillos multicolores. Los colores que se usan tienen como base al azul, rojo, amarillo y verde, propios de este juguete.
La habitación que se armó en dos meses está en 28 m2 y la distribución del espacio, pensada en tres zonas. Una es la de juegos y arte, otra es la de estudios y la tercera, de descanso; la separación no es física, sino visual.
Las paredes y tarima son lavables, ya que a los niños les encanta pintar en paredes y pisos. “Tenemos un muro pizarra para sus dibujos y tareas y un muro de corcho donde pueden poner su trabajo, y cuando sean más grandes, fotografías”, sugiere.
En cuanto al dormitorio diseñado para niñas, la responsables, arquitectas y diseñadoras de interiores Tatiana Vargas, Marian Añez y Mariella Llapíz iniciaron con una encuesta a niñas de entre ocho y 12 años, para captar los colores de mayor predominancia. En este caso fueron el fucsia y el lila.
Vargas explicó que se creó el dormitorio en un espacio de 5 x 4 m2 en una semana. “El espacio tiene 3 áreas, una de descanso, otra de trabajo o estudio y una de recreación, con el fin de que la niña sienta que es su espacio de refugio, pero, sobre todo, de intimidad”.
Dentro de la parte arquitectónica se plasmó en las paredes un diseño de flores (elegidas por las niñas), con luces suaves para permitirles un buen descanso, detalle que se aprecia al apagar las otras luces del ambiente. “Esto porque a muchas pequeñas no les gusta dormir en oscuridad. También se realizaron cortes agresivos en el cielo falso y una de las paredes para darle un toque de modernidad”, comenta.
Vargas encabeza la empresa Koulé Diseños a tu Imagen y le fue muy práctico armar el dormitorio en el que puso una cama de dos plazas, pensando en que el mueble tenga una larga vida útil. También hay una hamaca para que la niña se sienta cómoda para descansar o leer.
Los almohadones, mesas pequeñas, alfombras y otros son detalles que de preferencia deben ser livianos y pequeños, para ponerlos o retirarlos de acuerdo con la necesidad.
Texto: Fotos: Álvaro Mier, Casa Cor y Érika Ibargüen. Arquitectas que participan en Casa Cor: Rocío Rodríguez Zambrano, Verónica Paz Ibáñez y Lisette Áñez (dormitorio de niños) y Tatiana G. Vargas, Marian Añez y Mariella Llápiz (dormitorio de niñas).
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