Un jarrón con flores, velas, un espejo antiguo son las piezas y objetos decorativos que endulzan, dan calidez y personalizan las zonas de paso.
Una buena iluminación puede aportar más encanto y amplitud. En la entrada debe ser indirecta pero potente, que permita ver bien cada rincón y al mismo tiempo cree una atmósfera acogedora; y en el pasillo, deber ser una luz general, abundante y sin sombras.
Las alfombras protegen el suelo, dan calidez y pueden modificar la percepción del espacio, dinamizar, dar color.
Un buen mueble también es una opción. Si tiene espacio, una consola o una butaca quedarán geniales
No hay comentarios:
Publicar un comentario