El ejemplar es conservado todavía en la maceta, aunque muchas personas les aconsejaron cortar la planta y guardar el trébol en medio de un libro o incluso hacer un cuadro que adorne, un lugar privilegiado del hogar.
El trébol de cuatro hojas es una variación poco frecuente de ésta especie y la probabilidad de encontrar es una entre diez mil. Se asocia su hallazgo con la buena suerte asignando a cada una de las hojas representaciones de los componentes básicos de la felicidad: amor, salud, prosperidad y la buena fortuna.
José Aramayo, dijo que guardará el ejemplar, una vez que la plantita se seque, tanto por ser algo curioso que apareció en una maceta, donde ellos tienen otra especie de planta y más aun sabiendo que la probabilidad de hallazgo es de uno entre diez mil y respetando las creencias místicas también para tener un amuleto de la buena suerte.
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